miércoles, octubre 14, 2015

Soledades



Rodeadas por el violáceo ponto de la vida hay mujeres que nacemos isla; acogedoras y peligrosas, atravesadas por grutas que resguardan fuego, milenarios y húmedos silencios. Ambiguas. A punto de hundirnos o resurgir hemos transcurrido el tiempo. Descubriéndonos a solas, vivimos, hurgando en lo que nos conecta con el centro.